Los espacios orgánicos para plantas y jardines tienen un impacto positivo en el ambiente y mantienen el aire limpio, absorben toxinas y el dióxido de carbono.
No solo son las nuevas generaciones las que están interesadas en los temas verdes, sustentables y de economía circular. Actualmente, en su conjunto más mexicanos toman conciencia de la necesidad de cuidar el medio ambiente.
Sin embargo, son todavía pocos los que se atreven a modificar, a través de pequeñas prácticas cotidianas, el reciclaje de desechos o el hecho fundamental de decidir vivir en un inmueble acorde con el entorno.
En este sentido, los fraccionamientos sustentables son una tendencia que va al alza, aunque no se trata de un fenómeno exclusivo de la CDMX. Pero esta opción de vida sostenible en un fraccionamiento es más fácil de lograr de lo que la mayoría de la gente piensa. La adopción de políticas “verdes”, son accesibles, además de garantizar la seguridad y bienestar de los inquilinos.
Entre los argumentos más importantes para optar por un fraccionamiento sustentable están:
1.- Contar con energías renovables. Extraídas desde fuentes limpias como el sol o el aire, son una alternativa en un fraccionamiento verde; incluso, algunos desarrolladores ofrecen descuentos a los condóminos que opten por instalar un panel solar, por ejemplo y además promueven la elección de electrodomésticos que ahorradores, desde focos no incandescentes hasta smart television.
2.- Una ubicación que no genere desplazamientos. Esta no tiene que ver con elementos que conforman el inmueble, pero importa a la hora de calificar a un fraccionamiento porque ofrece la oportunidad a sus habitantes de llegar a pie o en bicicleta al trabajo, supermercado o centros comerciales. El objetivo es usar menos el automóvil y promover el transporte público, ayudando a reducir las emisiones de CO2.
3.- Espacios orgánicos las plantas y los jardines tienen un impacto positivo en el ambiente y mantienen el aire limpio, absorben toxinas y el dióxido de carbono.
Debido a la relajación y a la belleza que aportan a las residencias, los fraccionamientos sustentables desarrollan espacios interiores y exteriores pensando en más jardines. Existen opciones para incorporar jardinería, sin importar el tamaño del espacio. Incluso, los condóminos pueden solicitar a la administración aumentar la vegetación alrededor del fraccionamiento.
Los espacios orgánicos para plantas y jardines tienen un impacto positivo en el ambiente
4.- Manejo residual. El manejo de los desechos es parte de una vida sostenible que implica la separación correcta de la basura y busquemos puntos de reciclaje en el propio fraccionamiento.
Debemos ser conscientes de cuánto consumimos y hacerlo cuando es necesario. También se pueden reemplazar bolsas descartables por reutilizables. En algunos complejos se hacen compostas con residuos con las que se construyen hortalizas para el consumo de vegetales de los residentes.
5.- Aislamiento térmico correcto. Algunos estándares para hogares con visión ecológica incluyen mayor aislamiento para utilizar menos energía para calefacción, lo que se traduce en mayor eficiencia energética.
Para ello, se pueden instalar pisos, techos y paredes aislantes para mantener las viviendas frescas en verano y conservar el calor en invierno.
Con estas soluciones se aporta a la calidad de vida de las personas y al medio ambiente. En este sentido, ComunidadFeliz promueve y fomentan la vida sustentable en fraccionamientos, con una app y plataforma, enfocada en digitalizar la administración de edificios y condominios.
“Observamos cada vez más en los fraccionamientos que hay una tendencia hacia una vida sustentable. Me refiero a la eficiencia energética, el manejo de los residuos, la proliferación de plantas y jardines, el reemplazo de los automóviles por las bicicletas, entre otras cosas”, afirma Enrique Gómez, Director Comercial de ComunidadFeliz.