Como cada año platicamos con Carlos Guzmán Tovar Ríos, CEO de la reconocida e importante empresa de Seguridad Privada CONPRYSSA, que lleva más de 25 años dentro del gremio y se dice fácil, pero este negocio es complicado, han surgido miles de empresas y de igual manera han truncado su desarrollo dado a que hay muchas aristas que son sumamente difíciles de solventar y de resolver para sobrevivir. Como todos sabemos, la seguridad es una de las necesidades humanas fundamentales y en nuestro amado México es un tema que a diario preocupa y ocupa tanto a las autoridades como a todos los ciudadanos que conformamos este territorio y con el auge de la tecnología que hoy en día nos sorprende cada vez más, el panorama de la industria de la seguridad privada es un ente gigantesco que cambia y evoluciona permanentemente.
ME.- Por favor Carlos queremos tocar contigo varios temas dentro de esta entrevista, comenzando por el estado actual de la industria de la seguridad privada en México, ¿cómo lo percibes al día de hoy?
CG.- La industria de la seguridad privada se enfrenta a una serie de desafíos, que incluyen una competencia cada vez mayor, costos crecientes, nuevas reformas laborales, escasez de trabajadores calificados y con un perfil acorde a cada necesidad y cliente, así como competencia desleal con miles de empresas clandestinas y dada la gran demanda que existe, estas proliferan de manera exponencial. Pero a su vez a pesar de estos desafíos también existen muchas oportunidades de crecimiento e innovación dentro de la industria, para las empresas que si cumplimos religiosamente con todas nuestras obligaciones.
Según datos recientes, se espera que la industria de la seguridad privada en México crezca a una tasa del 10% en los próximos cinco años, este crecimiento está siendo impulsado por una serie de factores, incluido el aumento de la demanda de servicios de seguridad post pandemia, el crecimiento de mercados emergentes y la constante amenaza de la inseguridad en nuestro país.
ME.- Hoy en día vemos que la tecnología en todos los ámbitos se desarrolla de manera exponencial, ¿cómo sientes que va a impactar esto dentro de la industria?
CG.- La tecnología está teniendo hoy un profundo impacto en el medio de la seguridad. Por un lado, ha permitido a las empresas de nuestro sector brindar servicios más eficientes y eficaces automatizando muchos procesos que antes se llevaban de manera analógica, por ejemplo, el uso de sistemas de autenticación biométrica ha hecho que el control de acceso sea mucho más seguro y ágil. Por otro lado, la tecnología también ha introducido nuevas vulnerabilidades que es necesario abordar. Los ciberataques, por ejemplo, se han convertido en una gran preocupación para las personas, empresas y gobiernos hoy en día.
A pesar de esto, la tecnología continúa dando forma al futuro de la seguridad, a medida que la inteligencia artificial, la robótica y el Internet sigan evolucionando, las empresas de seguridad podremos ofrecer soluciones aún más avanzadas a nuestros clientes. Sin embargo, es importante recordar que la tecnología no es un remedio infalible, corresponde a nosotros, los profesionales de la seguridad, mantenernos constantemente informados y actualizados sobre las últimas amenazas e innovaciones para brindar el mejor servicio posible.
ME.- ¿Qué tendencias emergentes dentro de este inmenso mundo de la seguridad ves en el futuro cercano que puedan ayudar o en su caso sustituir el elemento humano dentro del medio?
CG.- El futuro de la industria de la seguridad privada es apasionante y desafiante. Con el avance de la tecnología, podemos esperar ver una transformación en la forma en que se prestan los servicios de seguridad y mirando hacia el futuro, es imposible que ignoremos los que nos dedicamos a esto, el impacto que las tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, que hoy está en todos lados y presuntamente ocupa en el ciberespacio ya un pedazo del pastel muy importante, así como la robótica y la IoT que lo están invadiendo también. Estas tecnologías están revolucionando la forma en que se proporciona seguridad, haciéndola más eficiente, eficaz y asequible que nunca.
Un ejemplo de ello es el uso de drones para vigilancia y seguimiento. Hoy en día los drones pueden cubrir grandes áreas rápidamente y proporcionar transmisiones de video en tiempo real al personal de seguridad, lo que nos permite responder a las amenazas de manera más rápida y precisa. Otro ejemplo es el uso de tecnología de reconocimiento facial, que puede ayudar a identificar amenazas potenciales incluso antes de que ingresen a una instalación, lo vemos hoy en día en los principales aeropuertos del mundo en donde ya no es necesario tener un agente de migración para ingresar a un país, lo mismo pasará en un futuro no muy lejano en los corporativos, condominios y casas inteligentes.
ME.- ¿Crees que la integración del capital humano en sinergia con los elementos tecnológicos son el esquema ideal para un programa exitoso de seguridad?
CG.- A medida que el elemento de seguridad y la industria de la seguridad privada continúen evolucionando y avanzando, la integración es más que una palabra de moda, que, con sistemas cada vez más complejos se integran en una sola plataforma con diferentes funciones, incluidos informes de incidentes, monitoreo de cámaras y sistemas de recorridos por elementos de seguridad, para crear un programa integral.
Si bien en el pasado pudo haber un guardia de seguridad o una cámara de seguridad, hoy en día a se requieren ambos, no como dos funciones separadas, sino como un sistema integrando un binomio. Si agregamos a esta receta un sistema de control de acceso y sensores de movimiento sofisticados se transforma en un esquema mucho más robusto y certero. Si bien la industria puede estar inundada con demasiados productos, sistemas y opciones, lo ideal es un conjunto integrado y cuidadosamente seleccionado de soluciones de seguridad específicas para las necesidades de una ubicación en particular.
Crear una solución de seguridad en la que todas las piezas funcionen como un reloj es esencial para crear un entorno seguro, resaltando que, a lo largo de todo este desarrollo e innovaciones técnicas, no se nos puede olvidar que, el elemento central de todo programa de seguridad exitoso es el guardia. Todo lo que hagamos para apoyarlos e involucrarlos dentro de la arquitectura de prevención dentro de los servicios asignados, es fundamental. Estas personas se dedican a crear entornos seguros todos los días. Estos héroes como a mí me gusta llamarlos, que a menudo son anónimos, asumen una variedad de responsabilidades, desde ser la primera figura en dar la bienvenida a los visitantes y empleados, así como dar guía e información respondiendo preguntas generales a diario, interactúan con las autoridades locales, lideran evacuaciones y hasta responden a emergencias médicas en su caso. Independientemente de cuán simple o complejo sea el panorama o reto de seguridad, nuestros guardias son una pieza fundamental de este rompecabezas y siempre son nuestra primera línea de defensa contra casi todas las amenazas que se presentan dentro de un servicio. Claro que debemos seguir siendo proactivos en el desarrollo de programas y soluciones que puedan ayudarlos a rendir al máximo, lo que incluye brindar capacitación periódica y dotarlos de equipos y sistemas de última generación de manera tal que puedan ejercer su labor de manera efectiva.
ME.- En tu experiencia de más de un cuarto de siglo dentro de este sector en donde has sido testigo de la evolución de esta industria, ¿cuáles serían tus puntos para concluir esta charla con base en los temas abordados?
CG.- En conclusión y siendo concreto, la industria de la seguridad privada se enfrenta tanto a desafíos como a oportunidades dentro del panorama actual. Si bien la tecnología ha generado avances significativos, también ha creado nuevas amenazas que deben abordarse.
Para mantenernos a la vanguardia, es esencial que las empresas nos adaptemos y adoptemos estos cambios permanentes y continuos. Al invertir en soluciones innovadoras y mantenernos actualizados con las últimas tendencias disponibles, las organizaciones no solo pueden mejorar sus medidas de seguridad sino también sus operaciones generales. El futuro de la industria de la seguridad privada es brillante y aquellos que estén dispuestos a asumir riesgos y aceptar el cambio sin duda cosecharán los frutos de estos nuevos beneficios.