LOGÍSTICA VERDE, EL APORTE DE LOS ECONOMISTAS FRENTE A LA CRISIS AMBIENTAL

Su función es alentar la sustentabilidad en las cadenas de producción.

Por María Luisa Santillán, Ciencia UNAM-DGDC

El cambio climático, la sobreexplotación y agotamiento de los recursos naturales, la generación de residuos, la contaminación y la pérdida de la biodiversidad son temas que por lo regular se estudian desde el punto de vista ecológico; sin embargo, los economistas también se han adentrado en el análisis de estas problemáticas.

A través de la llamada logística verde —empleo de procesos amigables con el ambiente en las cadenas de suministro— algunas investigaciones se han enfocado en aportar soluciones para reducir el impacto ambiental que generan el transporte y la movilidad de productos.

La mayoría de las empresas tiene una logística para hacer más eficiente su funcionamiento con los menores costos posibles; sin embargo, algunos eslabones de la cadena de producción (fabricación, embalaje, transporte, almacenamiento y distribución) han generado graves problemas ambientales.

El rubro que mayor impacto ambiental tiene es el transporte, por ello la logística verde está trabajando en disminuir la dependencia de energía fósil y, por ende, mitigar la emisión los gases de efecto invernadero.

Asimismo, está enfocada en implementar acciones como el reciclaje, la disposición de desechos y la optimización de recursos en cada proceso

El doctor David Bonilla Vargas, del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, explica que la logística verde busca incorporar mejoras que redunden en un beneficio ambiental en toda la cadena de producción.

El término logística verde empezó a utilizarse en la década de 1990 en Estados Unidos. Sus preceptos fueron adoptados inicialmente por los corporativos y por las empresas automotrices, porque visualizaron una opción para ahorrar en el manejo de su cadena de suministro y al mismo tiempo cumplir con la legislación ambiental. En México, no existe una legislación que incentive el uso de este tipo de logística en las empresas.

Cambios en la cadena de suministro

¿Cómo emplear criterios enfocados en la logística verde en las empresas? El doctor Bonilla Vargas explica que podría ser a través del uso de transporte más pequeño, eficiente y con menor desperdicio energético, ya que por cada litro de gasolina se producen 2.5 kilogramos de dióxido de carbono, uno de los gases de efecto invernadero más importantes y que contribuyen al cambio climático.

Otra opción es usar trenes en lugar de tráileres, con lo cual habría un ahorro de diésel, de contaminación, así como una disminución de accidentes y de pérdida de tiempo por la congestión vial, lo cual también termina por mitigar problemas económicos, ambientales y sociales.

En la mayoría de los países, el transporte de mercancías consume alrededor de 25% de la energía fósil.

Otra sugerencia de la logística verde es colocar los centros de distribución cerca de los de consumo. Si hay demasiada distancia entre ambos el transporte recorre largas trayectorias, hay mayor consumo de gasolina o diésel y tráfico. Por lo tanto, ubicar estos centros por zonas geográficas generaría ahorro de combustible, explica el doctor Bonilla Vargas, especialista en gestión de energéticos y problemas de sustentabilidad.

También sería útil transportar el mayor número de mercancías por viaje, es decir, planear y optimizar mejor las rutas. Aunado a lo anterior, se debe dar mantenimiento a los vehículos para evitar cualquier desperfecto técnico y la emisión de contaminantes.

Aún no es para todos

En la actualidad, la mayoría de las empresas grandes son las que tienen más posibilidades de adherirse a la logística verde. En primer lugar, porque cuentan con recursos para adquirir más medios de transporte a menor costo y menos contaminantes. Y en segundo lugar, porque para ser más competitivos a nivel global deben establecer programas de eficiencia energética y cuentan con la infraestructura necesaria para cumplir con las legislaciones ambientales internacionales.

Esto no pueden lograrlo las pequeñas empresas, las cuales tienen costos de producción muy altos, ya que no cuentan con la suficiente tecnología ni los recursos para adquirirla. Algunas pueden tener transporte híbrido, sobre todo en las ciudades, pero en muchas localidades los camiones son antiguos y contaminantes.

El doctor Bonilla Vargas destaca la importancia de que el Estado brinde más apoyos a la pequeña y mediana empresa para poder innovar tecnológicamente, lo cual redundaría en cambios en toda su cadena de suministro y en la incorporación de la logística verde como parte de la corporación.

Sin embargo, dijo, también se necesita que haya más políticas enfocadas en impulsar la logística verde, pues hasta el momento en nuestro país es una idea que se ha popularizado entre las empresas más por voluntad propia que por indicación del gobierno.

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