Armando Zúñiga Salinas, presidente de Coparmex Ciudad de México, Grupo IPS y ASUME, reflexiona sobre la importancia del Registro de Prestadores de Servicios Especializados u Obras Especializadas para fortalecer las empresas de seguridad privada.
La seguridad privada es una de las actividades más importantes en el país y, también, una de las más especializadas. No sólo el marco de inseguridad que tenemos en la actualidad, sino por varias situaciones más en las que tiene un peso sumamente específico.
Coadyuva a garantizar la seguridad en instalaciones públicas y privadas, ayuda a que las inversiones que llegan al país se sientan y sepan seguras, porque algunas empresas cuentan con permisos para que su personal esté armado.
Un guardia de seguridad privada lo podemos ver en escuelas, centros comerciales, cines, corporativos, fábricas, concesionarias de autos, empresas que llegan con inversiones derivadas del Nearshoring.
En fin, en una cantidad impresionante de lugares que los empresarios les confían porque saben de sus altos estándares de trabajo.
Datos de Agrupaciones de Seguridad Unidas por México (ASUME), indican que la industria está conformada por cinco mil 400 empresas registradas en todo el país que generan, en total, alrededor de 900 mil personas.
En su conjunto, la industria de la seguridad privada genera el 1.8% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Para prestar sus servicios, estas empresas se rigen por leyes, tanto para darlos a empresas privadas como al sector público. La más importante, desde mi punto de vista, es la referente al Registro de Prestadores de Servicios u Obras (REPSE), ante la Secretaría de Trabajo y Previsión Social.
La Ley Federal del Trabajo en su artículo 15 establece que las personas físicas o morales que proporcionen servicios especializados o ejecuten obras especializadas deben contar con un registro ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Todas y cada una de las empresas de seguridad privada están obligadas a tener vigente el REPSE con el objetivo no solo de generar confianza al momento de contratar a un proveedor de estos servicios.
Dicho registro demuestra que cumple con la Ley en el pago de sus impuestos y carga social, lo que asegura que sus facturas serán deducibles para sus clientes.
El principal objetivo del REPSE es eliminar prácticas que dañan los derechos laborales, evitar la evasión de obligaciones patronales y la defraudación fiscal.
El 20 de abril del 2021, el Senado aprobó esta Reforma y el 24 de ese mismo mes entró en vigor, por lo que para febrero de 2024 el REPSE se tuvo que renovar.
Este requisito es muy importante ya que al contratar una empresa de seguridad privada se verifica la opinión positiva de cumplimiento ante el SAT, IMSS, INFONAVIT Y AFORE, además de sus certificaciones de calidad y recomendación de sus clientes.
En México, hay alrededor de tres mil 500 empresas de seguridad privada que no cumplen con el REPSE por lo que una vez que posibles clientes intenten contratarlas, no deberían prestar este tipo de servicios.
Aunado a lo anterior, datos del IMSS indican que hay hasta siete mil 500 empresas de seguridad privada, pero menos de 200 tienen permiso para portación de armas de fuego.
¿Por qué decirlo? Porque es imperante que todas las empresas de esta industria cuenten con este importante requisito para poder operar de forma segura, leal, comprometidos con dar lo mejor a sus clientes, pero también a sus colaboradores, porque sin ellos y la garantía que les da el REPSE, no seríamos lo fuerte que somos.
Fuente: Excelsior