La prohibición de la figura de la subcontratación sería un golpe devastador para la economía mexicana, luego de que esta se contrajo 8.5 por ciento en 2020 y afectaría a millones de familias, consideró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El organismo dirigido por José Medina Mora Icaza señaló que existe la evidencia técnica suficiente para advertir que la eliminación del outsourcing distorsionará el mercado laboral y tendrá efectos directos adversos para la economía que observa debilidad.
Explicó que se estima una pérdida de puestos laborales de alrededor de 2 millones de los 4.1 millones que existen actualmente bajo esa figura laboral y que representa el 20 por ciento de todo el empleo formal del país.
Resaltó que 4 de cada 10 personas subcontratadas son mujeres, mientras que 1 de cada 4 son jóvenes.
Abundó que debido a la pandemia del coronavirus, 2.1 millones de trabajos aún no se recuperan, por lo que la eliminación del outsourcing significaría más dificultades para la recuperación del empleo.
Puntualizó que en caso de que México implemente una política restrictiva se provocará una severa pérdida de competitividad frente los países con esquemas laborales flexibles.
Subrayó que el impacto social de una probable prohibición se traducirá en la precarización en la calidad de las fuentes de empleo y en la calidad de vida de miles de familias.
Agregó que estimaciones de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) indican que desaparecer al outsourcing significa que la informalidad pase de 56 a 70 por ciento.
La Coparmex llamó a los legisladores a analizar y discutir con objetividad la iniciativa para regular la subcontratación, para que no se termine por afectar a los trabajadores que se pretende proteger.
El organismo empresarial externó su “total disposición para colaborar en la identificación de actos de simulación de relaciones laborales, de sub-registro de ingresos o de evasión fiscal”.
Comentó que su prioridad es proteger los derechos laborales y evitar a toda costa que se pierda uno solo de los 4.1 millones de empleos que están bajo el esquema.
“Superar la crisis más severa de la historia, requiere de la suma de esfuerzos. Desde la Confederación estamos listos para aportar nuestro granito de arena”, dijo.