Para emprender con éxito, es ideal conocer bien las etapas de un plan de negocios. ¿Cuáles son?
Por estos días, sea en el área que sea, resulta una quimera lanzarse al mercado de manera improvisada, solamente munido de bríos e instinto, sin un plan. Puede funcionar, sí; un golpe de suerte lo tiene cualquiera, pero es necesario, entre otras cosas, establecer acciones, objetivos y estrategias. También, saber bien qué es un mapa conceptual ya que puede ser de suma ayuda, dado que se trata de una forma simple y veloz para generar nuevas ideas y estructurarlas a la hora de innovar con la mayor velocidad posible.
En el mundo empresarial, grandes, pequeñas y medianas empresas funcionan en base a un plan de negocios. Dicho plan es formulado y mejorado de manera constante y acorde con los resultados que arroja. Lo mismo, en la actualidad, sucede con emprendimientos más modernos como las startups. Cumplir las etapas de un plan de negocios les sirve de orientación y para saber qué hacer para estar a la altura de los objetivos trazados. De aquí, básicamente, surge su importancia.
En orden, estas son las etapas y algunos tips para la generación de un plan de negocios:
Realizar un resumen ejecutivo. Es lo primero, el extracto que debe abrir el plan. Debe enunciar las cuestiones más relevantes que faciliten una mirada veloz de todo lo que contemplará el documento en su totalidad. Debe ser útil, por caso, al momento de presentarle el plan a un inversor interesado. El resumen ejecutivo, idealmente, no debe tener más de dos páginas y lo mejor es realizarlo finalizado tu plan de negocios.
Presentar de manera acabada la empresa. Esta etapa es clave, dado que aquí se brindará lo más jugoso del plan de negocios. Aquí, debe ser correctamente descrita la empresa, mencionarse el servicio y/o producto que ofrece, contextualizar su historia y explicar sus metas y objetivos en el mediano y largo plazo.
Detallar bien la actividad económica. El servicio o producto ofrecido; esa es la actividad económica que da cuenta de la descripción de una empresa. Puede ser de prestación de servicios, producción o cualquier otra cosa. Es clave el detalle; se debe describir con celo lo que se va a vender, lo mismo que destacar las características que hacen de ese servicio o producto un bien único y original, con el toque característico de la empresa.
Explicar las estrategias de marketing y ventas. ¿Qué estrategias se utilizarán? En esta etapa de un plan de negocios debes hacerlas explícitas para incentivar el consumo de lo que se pone en venta. Puede hacerse a partir de fotos, muestras gratis, descuentos o testimonios, por caso. Es importante dejar claro cómo se distinguirá la empresa de su competencia, el modo de resaltar.
Dar a conocer lo operativo (cómo se trabaja). Aquí se trata de mostrar lo administrativo, aquellos aspectos operativos de cómo se trabaja; dónde se encuentran las oficinas centrales; los recursos técnicos, humanos y financieros; y los proveedores, entre otros.
Resaltar la administración. Viene de dar a conocer el funcionamiento de la estructura que tiene a cargo todo lo referido a la administración. Es importante que se explicite bien, con claridad, la importancia de cada una de sus áreas.
Proyectar un futuro atractivo. Este es, probablemente, el desarrollo más extenso que debe contener un plan de negocios. Quien lo desarrolle deberá inspirarse y proyectar el futuro, cómo se desenvolverá el emprendimiento en el mercado, cómo se parará frente a su competencia y, claro, ante sus potenciales usuarios. De algún modo, se trata de darle rienda suelta al optimismo, permitirse soñar y dar cuenta de esas proyecciones.
Realizar una síntesis financiera. La última de las etapas de un plan de negocios trata de hacer ver los datos financieros en los que un emprendimiento se basa. No hay que inventar datos, sino valerse de información real que vuelva atractivo el plan. Balances, estados financieros, retorno de inversión, ventas por mes…, de esto se trata.
La importancia de los mapas conceptuales
Más allá de conocer las etapas, elaborar un plan de negocios exitoso demanda trabajo y tiempo. En este sentido es que un mapa conceptual puede ser un vehículo clave para la generación de ideas nuevas, organizar la información y visualizar con claridad los conceptos más complejos.
Las etapas de un plan de negocios son el primer peldaño para asentar una empresa. Con datos reales, información detallada, real y valiosa, se trata una guía sumamente importante para desandar el camino.
