LAS FINANZAS PERSONALES EN LA ECONOMÍA INFORMAL

Medir la actividad informal tiene un grado de dificultad porque carecen de registros; sin embargo, se estima que genera 30 por ciento de la producción del país y 60 por ciento de los empleos; ahí se encuentran, desde quienes venden en los cruceros, hasta servicios profesionales, constructores, agricultores, etcétera. ¿Cómo administrar las fianzas personales de este segmento de la población?

El punto central de la economía informal es dejar de pagar impuestos; empero, el estar fuera del escrutinio del SAT también tiene repercusiones a considerar.

1.- Sus ingresos tienden a ser volátiles; es decir, en una temporada obtienen ganancias altas, mientras que en otras bajan en forma significativa el flujo de entradas. Esto obliga a planear con un mayor plazo.

Primero, es necesario contar con una aproximación de los ingresos, con base en la experiencia de años previos y ajustando con la expectativa presente. Si bien es conveniente hacer un presupuesto de gastos mensuales, vale la pena tener un horizonte de al menos tres meses de compromisos, de tal manera que siempre se esté cubierto. Por ejemplo, de enero a marzo y luego de febrero a abril; así sucesivamente.

El riesgo de no hacerlo es que en un mes bueno se decida excederse en los gastos, presentando problemas para cubrir los siguientes.

2.- Un aspecto importante en la informalidad es la ausencia de prestaciones de ley y, por consiguiente, se carece de la cobertura de salud a través del IMSS y de pensión para el retiro por medio de la Afore.

Habrá dos opciones en este caso, hacerlo con aportaciones voluntarias o adquirir un seguro de gastos médicos mayores; además de ahorrar para la vejez con los instrumentos financieros a su alcance.

Es fundamental tener estos datos en el radar, porque podrían provocar un grave desbalance patrimonial.

3.- Una de las consecuencias de la informalidad es la complicación para comprobar los ingresos ante una institución y por tanto el difícil contratar financiamiento. La recomendación sería generar historial con tarjetas de crédito que puedan a su vez darle la solvencia para después obtener algún apalancamiento relevante, como sería un hipotecario.

Sólo cuidar que el pago de las tarjetas sea oportuno y del saldo completo al corte para esquivar los intereses que son demasiado altos.

4.- Otro efecto colateral es la menor bancarización, pues hay quienes lo evitan para no ser detectados por el SAT. Es común el manejo del efectivo, lo cual implica riesgos de inseguridad y la gran limitante de estar fuera de la posibilidad de ahorrar en el sistema financiero.

Valora si es preferible entrar a la formalidad, ya que en ocasiones se tiene una mala percepción de los impuestos, cuando a ciertos niveles de negocio son mínimos.

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