La Secretaría de Economía indicó que el descenso en la inversión se explica, fundamentalmente, por los efectos negativos de la pandemia de Covid-19.
México captó 29,079.4 millones de dólares de Inversión Extranjera Directa (IED) en 2020, un descenso de 11.7% en comparación con la cifra preliminar del mismo periodo del año anterior, informó este jueves la Secretaría de Economía.
El monto fue resultado de la diferencia de 39,220.3 millones registrados como flujos de entrada y 10,140.9 millones en flujos de salida.
En un comunicado de prensa, la Secretaría de Economía indicó que el descenso en la inversión se explica, fundamentalmente, por los efectos negativos de la pandemia de Covid-19.
De hecho, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) estimó que en 2020 los flujos globales de IED disminuyeron 42% con respecto a 2019, según el World Investment Report publicado en enero pasado.
“Esto evidencia que, en comparación con el resto del mundo, México tuvo un mejor desempeño en la atracción de IED en el año más adverso de la historia económica reciente”, añadió la Secretaría de Economía.
En 2020 se anunciaron 212 proyectos de inversión extranjera para ser materializados en México, que representan un monto de 16,253 millones de dólares, de los cuales ya se han reportado 5,838 millones al Registro Nacional de Inversiones Extranjeras.
La IED registrada para enero-diciembre de 2020 provino de: 3,334 sociedades con participación de capital extranjero; 2,725 contratos de fideicomiso, y 24 personas morales extranjeras.
Al mismo tiempo, la IED se financió principalmente a través de reinversión de utilidades, en 55.4%; seguida de cuentas entre compañías, en 22.6% y por nuevas inversiones, en 22.0 por ciento.
Las nuevas inversiones comprenden aquellas en activo fijo y capital de trabajo para la realización habitual de actos de comercio en México; la aportación al capital social de sociedades mexicanas por parte de los inversionistas extranjeros; la transmisión de acciones por parte de inversionistas mexicanos a inversionistas directos, y el monto inicial de la contraprestación en los fideicomisos que otorguen derechos sobre la IED.
En tanto, la reinversión de utilidades corresponde a la parte de las utilidades que no se distribuye como dividendos y que se considera IED por representar un aumento de los recursos de capital propiedad del inversionista extranjero. Y las cuentas entre compañías son las transacciones originadas por deudas entre sociedades mexicanas con IED en su capital social y otras empresas relacionadas residentes en el exterior.
Por sector económico, se desagrega en: manufacturas, con 40.6%; servicios financieros y de seguros, con 23.2%; transportes, con 9.8%; comercio, con 7.7%; minería, con 4.6%; y medios masivos con 4.3 por ciento. Los sectores restantes captaron 9.8 por ciento.
Por país de origen, los flujos de IED provinieron principalmente de los socios del T-MEC en 53.6% (Estados Unidos, 39.1% y Canadá, 14.5%), seguidos por España en 13.7%, Japón en 4.2%, Alemania en 3.5% y de otros países que aportaron el 25.0% restante
Los montos reportados únicamente consideran inversiones realizadas y formalmente notificadas ante el Registro Nacional de Inversiones Extranjeras de la Secretaría de Economía; de ahí su carácter preliminar y el que se actualicen en los trimestres sucesivos.
La metodología para determinar la IED se basa en estándares internacionales, contenidos tanto en el Manual de Balanza de Pagos del Fondo Monetario Internacional (FMI) como en la Definición Marco de Inversión Extranjera Directa de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Las cifras de IED fueron revisadas conjuntamente por la Secretaría de Economía y el Banco de México, y se integrarán al Informe de Balanza de Pagos de este último.