Rosario Marín, quien llegó a los Estados Unidos proveniente de una familia de escasos recursos y sin hablar inglés llegó a convertirse en la primera Tesorera mexicana de los Estados Unidos, durante la entrevista en exclusiva para Mundo Empresarial nos habla de cómo superar obstáculos y sobre tener resiliencia para lograr todas tus metas en la vida, cómo podemos no perder la fe y el optimismo, y cómo podemos obtener fuerza de las situaciones difíciles para superar todos los desafíos que se pongan delante de nosotros, como las crisis nos hacen más fuertes pues acaban trayendo resiliencia, más competitividad a las organizaciones y, por tanto, más innovación.
ME.- Rosario Marín es una política mexicano-estadounidense que fue la 41.º Tesorera de los Estados Unidos, desde el 16 de agosto de 2001 hasta el 30 de junio de 2003, bajo el primer término de la presidencia de George W. Bush. Ella es la primera persona en asumir este cargo sin haber nacido en los Estados Unidos.
En 2011, publicó su autobiografía «Una líder entre dos mundos», donde relata la historia de su vida. Rosario Spíndola nació en la Ciudad de México. Rosario es un placer tenerte en el piso 51 de la Torre Mayor en la Ciudad de México donde hay una excelente vista, cuéntanos sobre tu vida.
RM.- Es interesante como la vida te va marcando el camino, hoy día después de tantos años puedo ver la jornada, sin quererlo y sin buscar fui teniendo experiencias que me llevaron de ser una inmigrante hasta ser tesorera de Estado Unidos, muchas de estas situaciones son situaciones que yo no pedí, empecé a trabajar en un banco como la asistente de la recepcionista, no había nada más abajo, ¿Cómo iba a saber que en 6 años me nombrarían presidenta de un banco comercial muy muy grande? Trabajé en Beverly Hills y ellos veían que yo trabajaba duramente en el día y después me iba a la universidad pública East Los Angeles College por la noche. Me gradué en 1980 y seguí tomando clases nocturnas en el campus de Los Ángeles de la Universidad Estatal de California (CSULA), me gradué de CSULA en 1983 con una licenciatura en administración de empresas, vengo de una familia muy pobre y no tuve el lujo de ir a una escuela, colegio o universidad privada ni mucho menos, nadie me dio becas, nadie me pagó nada, tuve que hacer toda mi carrera universitaria con mi propio esfuerzo, en ese periodo de mi vida es cuando nace mi hijo Eric, quien fue diagnosticado con síndrome de Down, entonces mi vida cambió y se transformó de ser banquera a servidora pública, jamás me imaginé que eso me llevaría a trabajar para el gobernador de California Arnold Schwarzenegger y pudiera ayudar a cambiar las leyes de California.
Serví como Secretaria de la Agencia de Servicios al Estado y Consumidor en el gabinete del gobernador Schwarzenegger, tuve a mi cargo 17 departamentos con 17,000 empleados.
Rosario Marín fue alcaldesa y concejal de Huntington Park, ciudad con 85,000 habitantes, cuyo 99% de su población está conformada por habitantes hispanos. Fue elegida por primera vez en el Ayuntamiento en 1994 y fue reelegida abrumadoramente en 1999. Al mismo tiempo que servía a los ciudadanos de Huntington Park, Rosario Marín trabajó para AT&T como Gerente de Relaciones Públicas para el mercado hispano en la Región Sur de California. Anteriormente, se desempeñó como directora Adjunto de la Oficina del Gobernador de Relaciones con la Comunidad, en Los Ángeles, como parte de la administración del exgobernador Pete Wilson.
De igual modo, Rosario Marín se desempeñó como presidenta del Consejo de Estado sobre Discapacidades del Desarrollo y, anteriormente, como Jefa de Asuntos Legislativos del Departamento de Servicios de Desarrollo. Como resultado de tener un hijo con síndrome de Down, el compromiso de Marín a las personas con capacidades especiales ha ganado numerosos premios, incluyendo el distinguido Premio Rose Fitzgerald Kennedy en las Naciones Unidas, el más alto reconocimiento internacional.
ME.- ¿Cuál fue su primer contacto con el presidente George W. Busch?
RM.- Cuando yo era alcaldesa de la de Huntington Park conocí al entonces gobernador de Texas, sabíamos que iba para presidente de Estados Unidos y me comprometí a ayudarlo porque vi el trabajo que había hecho con la comunidad latina y he visto tan buen trabajo en él que me dediqué a su campaña en California, trabajé en la difusión hispana como su representante hispanohablante. Poco después de su elección ocupé un lugar destacado en el círculo del presidente electo, y en abril del 2001, el presidente Bush reconoció mi trabajo al designarme como Tesorera. Se ratificó esta mención por el Senado estadounidense el 3 de agosto de ese año, por lo que renuncié a mi cargo de alcaldesa 3 días después.
Me dediqué de todo corazón a trabajar en pro de la campaña del entonces gobernador a presidente de E.U. George W Bush, jamás me imaginé que cuando él fuera presidente me iba a pedir ser la tesorera. Creo me eligió por lo que yo represento, represento al inmigrante, pero represento también a la cultura mexicana, represento a la alcaldesa de pequeñas ciudades y en Estados Unidos tenemos miles de ciudades pequeñas, represento también a la mamá de niños con discapacidades.
Él me escoge a mí y yo nunca dimensioné el tremendo honor y responsabilidad de firmar los billetes de Estados Unidos.
ME.- ¿Qué opina de los migrantes?
RM.- Los latinos además de que representamos la minoría más grande de los Estados Unidos, los mexicanos somos la mayor cantidad dentro de esa minoría que es muy importante en el liderazgo y el liderazgo femenino respectivamente, cada día los números son mucho más fascinantes porque va creciendo el empoderamiento latino del emprendimiento, de los emprendedores latinos hemos visto cómo han crecido pero a cantidades exorbitantes, es increíble el poder adquisitivo que tenemos los latinos y eso lo tenemos debido al empresariado porque somos 2 cosas distintas.
Siempre he dicho los inmigrantes son los mejores emprendedores, porque desde el momento que deciden dejar sus tierras han emprendido y además están con una mentalidad de trabajar fuerte y poder ser productivos. Tengo una cantidad enorme de amigos de conocidos que empezaron con un changarrito en la esquina y empezaron vendiendo lo que sea y hoy día son casos de éxito reales. Vienen con la mentalidad de “Yo aquí la voy a hacer”.
Estamos viviendo momentos históricos en los 2 países, ya lo viste, tenemos una primera presidenta mujer en México, lo cual habla muy bien del país que ha roto con esa barrera del machismo y de decir que México no estaba preparado para tener una presidenta y por otro lado estamos próximos a ver una elección muy importante para los Estados Unidos en donde también hay una mujer en la contienda y eso puede representar una relación muy diferente en muchos sentidos.
ME.- ¿Cómo observas a México y E.U. desde el punto de vista económico?
RM.- Aunque soy republicana de hueso colorado, no comparto para nada lo que dice el ex presidente Trump, espero que no llegue y voy a trabajar arduamente para que quede Kamala Harris, pienso que ella ha demostrado una capacidad tremenda no sólo porque claramente si llegas a ser presidente tienes una capacidad política tremenda, claro, pero esta ha sido muy buena cuando vemos que ha sido fiscal del condado, fiscal del estado, senadora del estado, vicepresidenta por 4 años, o sea su currículo es muy bueno muy capaz y yo creo que ella entiende los retos, porque al final del día yo creo que tenemos que que ser claros, hay retos muy fuertes como Estados Unidos, no solamente es el reto de gobernar al país líder del mundo, ella entiende el retos, pero yo creo que en un gobierno tú tienes que saber 2 cosas, saber los límites del gobierno y también tienes que saber la el potencial del gobierno, Trump no entendió los dos, entonces tienes una constitución y dentro de esa constitución dice lo que puedes o no hacer, tienes que entender cuáles son tus límites, también tienes que saber el potencial del gobierno. Es como una máquina, de la forma que yo lo explico el gobierno es como un tren con una gran máquina que va a tener que jalar 100 vagones, una locomotora que la primera vuelta requiere de una energía tremenda, y cuando tú entiendes que tienes a un gobierno como Estados Unidos como potencia, tenemos grandes instituciones, tenemos nuestros límites que nos da la constitución, pero tenemos un potencial cuando esta maquinaria funciona.
ME.- ¿Cómo es tu relación de pareja?
RM.- Soy un mujer que tiene un magnífico apoyo de mi esposo y yo creo que me casé con un hombre muy inteligente obviamente que se casó conmigo, pero yo pienso que si Alex no fuera como es, con mucha inteligencia emocional no hubiera llegado a donde he llegado, todo se lo debo a él y por eso al ver mi firma en los dólares, le parece un triunfo de ambos. “Es hermoso compartir con él el billete. Me llamo Rosario, pero Marín es su apellido. Esto es de los dos”, esto es mitad y mitad, aquí No dice María del Rosario Espinoza Mora, porque esto se logró juntos, tú ves a los (las) líderes más grandes que te puedas imaginar entonces están casados con la misma mujer, en mi caso pues con el mismo hombre, ha sido mi pareja por 43 años, saber que tienes tu pareja a tu lado que te va a apoyar en todo es tener muy claras tus prioridades.
ME.- ¿Cuál sería tu consejo para todas estas jovencitas que hoy te ven como una mujer exitosa triunfadora y líder?
MR.- Cuando el presidente me nombró a mí, me nombró porque soy mexicana, porque soy mujer, porque soy inmigrante, está es la razón por la que estoy ahí, para hacer la portavoz de todas esas personas y representarlos, y puedo quedarme callada, yo decía voy a hablar voy a expresar, voy a pedir y a exigir, porque si no lo hago entonces de qué sirvió que el presidente escogiera a una mujer.
ME.- ¿Cuéntanos de alguna anécdota con el ex presidente de E.U.?
MR.- Una cosa que me conmovió enormemente, mi padre fue conserje de edificios en Estados Unidos después de haber sido obrero en México, cuando llega a Estados Unidos él es una persona que limpiaba los pisos, baños y vidrios de muchas oficinas, entonces cuando ya me voy del tesoro porque voy a ir para el senado federal me mandan a llamar de la presidencia y me dicen que es deseo del presidente dar una despedida privada puede traer a la oficina oval a su familia, y yo le digo a mi esposo, el presidente nombra como a más de 5,000 personas a su administración y unos entran y salen, van y vienen y no a todos los que salen les va a dar una despedida privada, entonces dije muchísimas gracias, que honor, claro que sí, va mi esposo y mis hijos pero, hay gente que jamás va a poder entrar a la Casablanca por muchísimas razones, si el presidente está presente en la Casablanca hay menos posibilidades que la gente y hoy día peor pero en ese entonces era muy difícil entrar a la Casablanca, el servicio secreto sabe exactamente si tú vas a entrar a Casablanca ¿quién eres? ¿qué hiciste? ¿qué comiste ayer? ellos sabían perfectamente quién era mi padre, entonces ahí vamos el esposo de mis hijos y mi padre, entramos a la Casablanca a la oficina oval, George W. Bush abre la puerta me abraza me da un beso, saludó a mi esposo que ya lo había conocido anteriormente, a mis hijos ya los había conocido pero por protocolo uno los presenta y se queda con mi padre, se queda y le habla en español, le dice: “señor Espíndola quiero a nombre de la nación darle las gracias por sus sacrificios para que Rosario esté aquí”, el hombre más poderoso del mundo no se rebaja ante un obrero sino que lo eleva a su altura y le agradece su sacrificio. entonces digo Dios me ha dado grandes oportunidades, grandes momentos, con ese me voy.
ME.- ¿Algo más que desee agregar?
RM.- Si tú quieres conocer como es una persona, dale un poquito de poder. Te vas a dar cuenta de qué persona es”. También habló sobre el poder interno que poseen las mujeres en todos los ámbitos: familia, profesión y negocio. “No puedes buscar el poder por fuera, cuando no encuentres el poder que tienes dentro. Como hija, como madre, como empresaria, date cuenta de cuánto poder tienes tú”. Quiero compartir con ustedes para finalizar tres reglas de oro.
Siempre haz lo correcto. No importa, qué, cómo cuándo o dónde: hazlo todo el tiempo. En la política, es fácil hacer las cosas bien cuando las cámaras están corriendo, cualquiera lo puede hacer. Pero hacer lo correcto cuando nadie te ve es lo difícil. Cuando te critican, te señalan, cuando mienten y te traicionan. Cuando nadie te lo va a agradecer.
Da lo mejor de ti. “Siempre entrégate. Hazlo con ahínco, pues es tu misión. No sólo a lo que te haga decir: ‘esto es muy importante esto le voy a poner atención’. Tú demuestras quién eres en lo pequeño, no en lo grande. El pintor, cuando da el último pincelazo, ¿qué es lo que hace? pone firma. Lo mismo pasa contigo. Lo que tú haces, que merezca tu firma”.
Trata a la gente como quieres que te trate. “Tratamos muy bien al presidente, al jefe, al inversionista, al cliente mayor, pero, ¿qué pasa con el colega, con el subordinado, con el cliente que te da poquito, con el que te sirve, o trapea? Cuando el presidente George Bush conoció a mi padre, le agradeció en nombre de toda la nación los esfuerzos que hizo para que yo saliera adelante. Él no se rebajó, al contrario, elevó a mi padre”.