Juan Javier Grifaldo Reyes CPP, DSI, CICP,DES
Director de Operaciones Adjunto
Introducción
La estabilidad de la cadena logística entre México y Estados Unidos está siendo puesta a prueba. Los recientes disturbios en Los Ángeles, California, vinculados a las tensiones migratorias, no son eventos aislados ni localizados. Representan una señal de alerta para los países del continente, particularmente para México, que sostiene con EE.UU. una de las relaciones comerciales más dinámicas del mundo, con un intercambio de más de 800 mil millones de dólares anuales.
Este artículo examina el impacto directo e indirecto que esta crisis puede tener sobre el comercio, la logística y las operaciones empresariales mexicanas, así como las oportunidades que emergen de esta situación crítica.
El epicentro: ¿Por qué Los Ángeles importa?
Los Ángeles no es solo una ciudad: es un nodo logístico de primer orden a nivel mundial.
•Alberga los puertos de Los Ángeles y Long Beach, que juntos manejan más del 30% de las importaciones marítimas de EE.UU.
•Es punto de conexión de rutas ferroviarias y carreteras hacia el oeste, centro y este del país.
•Integra cadenas de valor con empresas de manufactura y exportación asentadas en Tijuana, Mexicali, Nogales, Ciudad Juárez y otras ciudades mexicanas.
Cuando se presentan disturbios sociales en esta región —como los generados recientemente por las protestas migratorias, cierres de vialidades, y tensiones raciales— la cadena de suministro México-EE.UU. se tambalea.
Principales riesgos para México
1. Interrupción de rutas logísticas y congestión portuaria
Los disturbios pueden provocar:
•Bloqueo de autopistas y accesos logísticos hacia centros de distribución.
•Paralización parcial de actividades en los puertos clave.
•Desvío de mercancías hacia rutas más largas o costosas.
Impacto para México:
•Productos exportados desde Baja California y Sonora pueden experimentar demoras, sobrecostos y pérdida de clientes por incumplimientos logísticos.
•Empresas del Bajío o centro del país que exportan vía terrestre o marítima hacia el oeste de EE.UU. verán afectadas sus entregas.
2. Inspecciones más estrictas en la frontera
La percepción de inseguridad en EE.UU. podría llevar al gobierno estadounidense a endurecer controles aduanales, aumentando los tiempos de revisión en garitas como:
•Tijuana–San Diego
•Nogales–Arizona
•Ciudad Juárez–El Paso
•Piedras Negras–Eagle Pass
•Nuevo Laredo–Laredo
Consecuencias:
•Lentitud en cruces diarios de mercancías.
•Afectación al modelo just-in-time, utilizado por automotrices y electrónicas.
•Mayor carga administrativa y de cumplimiento normativo para exportadores mexicanos.
3. Tensión comercial o restricciones políticas temporales
Si la situación en California escala, puede derivar en decisiones de política pública que afecten directamente a México, tales como:
•Cierre temporal de fronteras, como ocurrió en 2019.
•Suspensión o limitación de servicios de carga o comercio bilateral en determinadas regiones.
•Presión hacia México para contener flujos migratorios a cambio de mantener acuerdos comerciales.
¿Qué sectores están más expuestos?
¿Existen oportunidades en medio del riesgo?
Sí. En todo escenario de disrupción, también hay posibilidades de reposicionamiento estratégico.
1. Nearshoring acelerado
Empresas estadounidenses están buscando trasladar su manufactura desde Asia a México, para evitar riesgos geopolíticos. Esta situación refuerza la tendencia del nearshoring, y los disturbios en California podrían acelerar la relocalización de inversiones.
2. Fortalecimiento de hubs logísticos alternos en México
Estados como Guanajuato, Querétaro, San Luis Potosí, Jalisco y Durango están en posición de desarrollar infraestructura logística que sustituya la dependencia de la frontera norte.
3. Mayor demanda de servicios de seguridad y tecnología logística
Empresas que ofrezcan:
•Escoltas de carga.
•Trazabilidad GPS.
•Ciberseguridad en cadenas de suministro.
•Seguros de transporte y mercancía.
Verán crecimiento en la demanda de sus servicios.
¿Qué deben hacer las empresas mexicanas?
Recomendaciones inmediatas:
1. Auditar sus cadenas de suministro. Identificar puntos de dependencia crítica con rutas afectadas por Los Ángeles.
2. Diversificar rutas logísticas. Prepararse para operar vía otras fronteras o puertos (Tampico, Altamira, Veracruz, Mazatlán).
3. Ajustar contratos. Incluir cláusulas de contingencia ante bloqueos o cierres logísticos.
4. Invertir en digitalización logística. Para tener trazabilidad, eficiencia operativa y reacción rápida.
5. Establecer alianzas con cámaras empresariales y gobiernos estatales. Para monitorear riesgos y activar protocolos conjuntos.
Impacto específico en empresas de seguridad privada: traslado, custodia y logística protegida
La inestabilidad social y migratoria en ciudades clave como Los Ángeles también tiene consecuencias inmediatas para las empresas mexicanas de seguridad privada, en especial aquellas dedicadas a:
•Custodia de mercancías en tránsito.
•Traslado de valores entre fronteras.
•Protección de rutas logísticas hacia Estados Unidos.
Posibles afectaciones:
1. Mayor exposición a intentos de robo, saqueo o vandalismo, sobre todo en zonas de alta concentración migrante, carreteras federales o accesos a puertos/garitas donde hay disturbios o bloqueos.
2. Incremento en los riesgos operativos por desvíos de rutas, paradas forzadas, retención prolongada en puntos aduanales y tránsito por zonas poco seguras.
3. Presión sobre el personal operativo (custodios, escoltas, operadores) debido al aumento en la carga emocional, jornadas extendidas y posibles confrontaciones con personas en tránsito.
4. Mayor exigencia de cumplimiento normativo y coordinación binacional, especialmente si se cruza con agencias de EE.UU., como CBP, ICE o autoridades estatales.
Recomendaciones para el sector:
•Reforzar protocolos de seguridad reactiva y preventiva.
•Actualizar rutas seguras y análisis de riesgo diario, especialmente en cruces fronterizos y zonas cercanas a disturbios.
•Capacitar al personal en manejo de crisis, control emocional y actuación bajo presión.
•Mantener contacto permanente con autoridades mexicanas (Guardia Nacional, SEDENA, Guardia Estatal) y cámaras de transporte.
•Evaluar seguros de carga y responsabilidad civil, ante potenciales siniestros por disturbios o sabotaje.
Oportunidad estratégica:
En medio de este entorno de riesgo, las empresas de seguridad privada pueden reposicionarse como aliados logísticos clave, ofreciendo:
•Custodia inteligente y trazabilidad en tiempo real.
•Protocolos adaptables a zonas de riesgo.
•Reacción inmediata ante crisis en frontera.
Esto podría significar nuevos contratos con exportadoras, transportistas y operadores logísticos, que requieren elevar su nivel de protección ante la creciente incertidumbre transfronteriza.
Conclusión
La crisis migratoria y social en Los Ángeles es mucho más que un conflicto local. Es una advertencia regional que pone a prueba la resiliencia del comercio México-EE.UU. Las empresas que logren anticiparse, adaptar su cadena de suministro y repensar sus estrategias de exportación estarán mejor posicionadas para no solo resistir la tormenta, sino crecer dentro de ella.
México no puede controlar lo que sucede al norte de la frontera, pero sí puede fortalecer su interior para que ninguna crisis lo tome por sorpresa.
